Con el gusto de saludarles, quiero plasmar en estas líneas,
además de mi experiencia en la realización y colaboración de este espacio de difusión
e información, las emociones y movimientos que se han suscitado en su servidora
a lo largo de estos cuatro meses de trabajo.
El conocer más a fondo y de cerca lo que sucede en las
familias en proceso de adopción/ adoptivas y en las familias uniparentales me
ha permitido un cambio de perspectiva sobre las dificultades reales que enfrentan,
pues existen en ellas algunos conflictos característicos que son solucionables
y que enseñan a la familia el modo de adaptarse al nuevo núcleo y crear juntos
interacciones más adecuadas y sanas; lo anterior, además, me amplía el panorama
como psicoterapeuta pues me aumenta las posibilidades de intervención en estas
familias.
Cuatro aspectos que menciono a continuación ocupan el papel
protagónico de este trabajo:
Los hijos de la familia adoptiva, quienes han pasado por la
ruptura o ausencia del vínculo afectivo respecto a las figuras parentales y al
mismo tiempo experimentan en situación de calle o de orfandad, la necesidad de
guía, soporte, afecto y apoyo que los adultos pueden cubrir, con amor.
Los hijos de la familia uniparental, quienes enfrentan la
burla y discriminación de sus coetáneos por situaciones diversas y
circunstancias, a veces, ajenas a su voluntad, pueden presentar conductas extremas
como retraerse o explotar ante la crítica o ante la autoridad; lo cual es un punto
que amerita atención y no solo para eliminar esas conductas, sino también para
que exista mutua colaboración de la familia.
Los padres adoptivos, tienen una ardua tarea, pues no basta
con que se les valide como personas adoptantes, más bien, su gran labor inicia
en la construcción del lazo afectivo y de proporcionar amor, lejos de cubrir un
vacío con el hijo adoptivo.
La situación del padre o tutor único en el hogar, el cual es
merecedor de apoyo y oportunidades igualitarias en el ámbito laboral, así como
debe ser visto como un ser humano capaz de educar a sus hijos con calidad, estos
padres pueden emplear herramientas suficientes para el cuidado y disciplina de
los hijos.
Espero sea de utilidad, considerar oportuno aclarar la
situación, dilucidar los motivos, hablar con la verdad, aumentar la calidad en
la convivencia, propiciar una comunicación abierta y fluida, disponerse a
establecer relaciones de confianza y expresar el afecto y la importancia de
cada miembro de la familia; estas son acciones que pueden apoyar la calidad en
la comunicación, una dinámica familiar más funcional y un clima de respeto y
amor para el bienestar de todos.
Les agradezco nos lean y nos den la oportunidad de
mostrarles material que puede cambiar el panorama de estos temas que por lo
común son tabú.
Mi objetivo es orientar los pensamientos y sentimientos
hacia el bienestar y la calidad de vida tanto de hijos como de padres para que
estas familias tengan posibilidades de una dinámica más funcional, armoniosa y
cargada de esperanza en el presente y para el futuro.
En este valioso trabajo agradezco a mi compañera y amiga
Psicóloga Jeanette Jiménez Mora, quien es ejemplo de valentía y fortaleza y en
quien he tenido la fortuna de conocer a una gran mujer. A Lic. Rogelio
Chagoyan, quien nos apoyo en las cuestiones técnicas de la edición del blog y al
Lic. Raymundo Minto Reyes, el amigo que siempre está, por su apoyo en la
edición de recursos audiovisuales.
Psicóloga Carolina Mena de la Rosa
REFERENCIA
Mena, C. (2015). Ensayo sobre las familias en proceso de adopción y monoparentales.
En la vida cotidiana es muy común que padres adopten a niños y que aún tengan ese miedo de ser rechazados por la sociedad solo por que no traen su sangre. Desde mi punto de vista muy personal como dice la licenciada Carolina es de suma importancia que los padres día con día construyan un lazo afectivo fuerte con su hijo sin importar lo que dirá la gente, y sobre todo enseñándole a la sociedad que un padre no es el que engendra si no el que cuida y esta al pendiente del pequeño, esos son padres y si determinadas situaciones no les permiten ser padres biológicos pues no se acaba el mundo, en la actualidad hay infinidad de niños abandonados, en casas hogares que están en busca de amor y de una familia y pasea ansiosos de querer tener un hijo. Creo que el cambio empieza por uno mismo al romper todos esos tabús que existen.
ResponderEliminarAsi es Cynthia Alonso. Gracias por tu comentario!
ResponderEliminarHe tenido la oportunidad de conocer y de trabajar con niños en situación de calle, por lo cual estoy de acuerdo es vital establecer un lazo afectivo, debido al abandonó y a la violencia que han experimentado estos niños dificulta incorporarlos a una nueva familia, sin embargo el decidir adoptar a un niño es una gran muestra de amor, de buscar ofrecerle nuevas oportunidades y una vida diferente.
ResponderEliminarHe tenido la oportunidad de conocer y de trabajar con niños en situación de calle, por lo cual estoy de acuerdo es vital establecer un lazo afectivo, debido al abandonó y a la violencia que han experimentado estos niños dificulta incorporarlos a una nueva familia, sin embargo el decidir adoptar a un niño es una gran muestra de amor, de buscar ofrecerle nuevas oportunidades y una vida diferente.
ResponderEliminarGracias por tu comentario y opinión Mari Monarca!!!
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